¿Te preguntas cómo se hace el jugo de ajo? En esta publicación encontrarás su receta, sus beneficios principales y lo que hay que saber.
Y lo mejor de todo, es una de las bebidas más rápidas de preparar que hay.
¿Por dónde empezamos?
Equipamiento
- Una licuadora.
- Un cuchillo.
- Vaso grande o taza.
Ingredientes
- 1 diente de ajo pelado y crudo.
- 1 taza (250ml) de agua potable.
Receta: Jugo de ajo
Esta es, tal vez, una de las preparaciones más simples que hay.
- Pelamos el diente de ajo con un cuchillo.
- Luego, lo ponemos en el vaso de la licuadora junto con el agua y procesamos todo a velocidad máxima durante unos 30 segundos o hasta que no queden grumos.
Para terminar, ya podemos servir y tomar la bebida.
¿Para qué sirve el jugo de ajo? – Beneficios principales
Una de las principales características del ajo es su poder antioxidante (ayuda a combatir el daño oxidativo generado por los radicales libres), antiinflamatorio y antimicrobiano. Esto está dado por sus compuestos, como la alicina.
En este sentido, según expertos, el consumo regular de este alimento puede:
- Bajar el colesterol malo (LDL).
- Ayudar a evitar picos de glucosa en sangre.
- Prevenir enfermedades cardiovasculares y mejorar la circulación.
- En línea con el punto anterior, bajar la presión alta o hipertensión.
- Contribuir a proteger el cuerpo frente a invasores externos. Es decir, puede subir las defensas.
- Proteger frente a ciertos problemas del sistema digestivo, como el hígado graso.
¿El jugo de ajo funciona para adelgazar?
Esta bebida casi no tiene calorías. Solo incluye unas 4.4 kcal por preparación. Es decir, tiene el potencial de incorporarse a dietas para alcanzar el déficit calórico (quemar más calorías que las que se consumen). Por otro lado, es importante destacar que el ajo contribuye a eliminar grasa.
De todas formas, es clave seguir una dieta y hábitos adecuados para conseguir objetivos alcanzables y saludables. Si te interesa aprender más, visita nuestra publicación de jugos para bajar de peso.
Advertencias y posibles efectos secundarios / contraindicaciones
Si bien tiene muchos beneficios, es importante no comer demasiado ajo (en especial, si es crudo).
Su ingesta en exceso puede causar toxicidad en el corazón, el hígado y los riñones.
Por otro lado, su consumo en dosis normales podría generar acidez, diarrea y más problemas digestivos, entre otros.
Además, este alimento suele tener interacciones negativas con varios medicamentos. Recuerda consultar a tu médico antes de consumirlo en caso de tomar algún tipo de droga.
Para ver todas nuestras recetas con ajo, haz clic aquí.
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